El Parque Nacional Iguazú en Argentina, junto con el contiguo Parque Nacional Iguazú en Brasil y áreas protegidas adyacentes, constituyen el remanente protegido más grande de la selva subtropical Paranaense, que forma parte del Bosque Atlántico Interior. La rica biodiversidad incluye más de 2.000 especies de plantas, 400 especies de aves y posiblemente hasta 80 mamíferos, así como innumerables especies de invertebrados.
Entre ellas se incluyen raras especies carismáticas como son el yacaré overo (Caiman latirostris), el oso hormiguero gigante (Myrmecophaga tridactyla), el águila arpía (Harpia harpyja), el ocelote (Leopardus pardalis) y el jaguar (Panthera onca).
Al lado de las cascadas, a lo largo del río y en las islas hay un ecosistema altamente especializado lleno de vida que se ha desarrollado en respuesta a las condiciones extremas impuestas por la caída del agua y la humedad que provocan.